¡La historia de Claude Sigmund sobre cómo TITLE Boxing Club cambió su vida es realmente una inspiración!
“Siempre he sido físicamente activo. En bicicleta a menudo y antes de que mi hijo naciera, en bicicleta viajé 30 millas ida y vuelta al trabajo durante dos años. He corrido Tough Mudder, ando de excursión, juego de fútbol, etc. Sin embargo, hace unos años Sentía que el fuego se había apagado en mí. Estaba letárgico. No deseaba presionarme.
Después de una sugerencia de mi esposa, vi a mi médico de atención primaria. Prescribió un antidepresivo y otra droga, Alprazolam, que tomo “según sea necesario”. Mi médico se aseguró de que estaba haciendo suficiente ejercicio y comiendo bien. Después de describir mi rutina de dieta y ejercicio, se sintió muy feliz y me instó a seguir así. He seguido su consejo al pie de la letra. Estaba hablando de mi antidepresivo diariamente y mi “según sea necesario” 2-3 veces a la semana. Aunque me sentí mejor, todavía no era “yo”.
Empecé en TITLE Boxing Club porque necesitaba un cambio de mi rutina normal de ejercicios. Necesitaba una clase para presionarme en lugar de confiar en mis propios mecanismos internos. Mi depresión estaba causando que mis entrenamientos fueran menos y menos rigurosos. Comencé las clases de TITLE Boxing Club en agosto de 2016. Empecé a ir 3 veces a la semana. Cuando llegaron los acontecimientos de la vida y me vi obligado a perder una clase, tuvo un costo real. Sí, la clase fue un gran entrenamiento, pero para mí la clase era realmente acerca de liberar la ansiedad y el estrés.
Después de unos meses de boxeo (y kick boxing), noté que había reducido mi consumo de mi medicamento “según necesidad” a solo unas pocas veces al mes. En la marca de los seis meses, vi a mi médico para un chequeo. Estábamos hablando y estaba emocionado de escuchar que había estado reduciendo mi consumo de Alprazolam. Luego de una discusión adicional, decidimos reducir mi dosis de antidepresivo también.
Bueno, han pasado 8 meses desde mi último chequeo. Todavía estoy en mi misma botella de Alprazolam que se llenó en marzo de 2017. Todavía voy a acampar. Todavía en bicicleta y juego al fútbol. Por mucho que ame esas actividades, a nada le gusta el boxeo “.